"No podemos seguir debatiendo sobre temas que ya tienen 50 años, época en la que yo ni había nacido". Señaló Obama, hoy, en Colombia, en la Cumbre de las Américas.
Entonces no está a debate el robo de territorios que hiceron los Estados Unidos a México hace 150 años.
No está a debate el cobarde bombardeo sobre Hiroshima y Nagasaki.
Del salvaje colonialismo, que comenzó hace más de 500 años, ni hablar.
De la guerra que Estados Unidos tuvo contra España, ni una palabra puede decirse.
Ah, pero qué grandes beneficios siguen teniendo los Estados Unidos hasta hoy, gracias a sucesos de hace más de 50 años:
Poseer más de dos millones de kilómetros cuadrados robados a México.
Haber ocupado Japón y hacerla una aliada contra el socialismo después de la Segunda Guerra Mundial.
Conseguir el control del Pacífico y sus islas.
Ocupar el lugar del colonialismo español en Latinoamérica.
Obama quiere que la historia del mundo comience con él y sus hipocresías.
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