No cambian, ayer destrozaron a Hipatia, hoy, el mexicano(y pre-Santo) José Pérez Bautista amenazó con rociar con gas sarín a los que se manifiestan por una España sin cerebros encadenados.
En Madrid se revive le edad media. Ratzinger, un simulacro de ser humano, refuerza la irracionalidad humana.
José Pérez recibió, seguramente, la orden divina de castigar a los impíos. Pronto lo veremos hecho Santo.
Foto de J.L. Pino(EFE)
La pareja ideal para oscurecer el mundo: policía y sacerdote.
"¡Esta es la juventud del Papa!", eso grita la juventud desde núcleo de sus huesos, en Madrid.
Nadie grita: ¡Esta es la juventud de Carl Sagan!
Nadie grita: ¡Esta es la juventud de los que defienden y aman la Tierra!
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